OFELIA
de Juan Gelman
Esta Ofelia no es la prisionera de su propia voluntad
ella sigue su cuerpo
espléndida como un golpe de vino en medio de los
hombres
su cuerpo estilo renacimiento lleno de sol de Italia pasa
por Buenos Aires
Ofelia yo en tus pechos fundaría ciudades y ciudades de
besos
hermosas libres con su sombra a repartir con los
amantes mundiales
Ofelia por tus pechos pasa como un temblor de
caballadas a medianoche por Florencia
tus pechos altos duros come il palazzo vecchio
una tarde del verano de 1957
iba yo por Florencia rodeado de tus pechos sin saberlo
era igual la delicia la turbación el medio
las sombras empezaban a andar por las callejas con un
olor desconocido
algo como tus pechos después de haber amado
eras oscura Ofelia para entonces y enormemente triste
una adivinación una catástrofe
un oleaje de olvido después de la ternura
una especie de culpa sin castigo
de furia en paz con su gran guerra
andadas por Florencia con tus pechos yendo viniendo
por las sombras
con saudade de mí seguramente
tu hombro izquierdo digamos
lloraba a tus espaldas o largada sus ansias lentas en el
crepúsculo y ellas venían a mi sangre
o era un temblor como un presagio
gracias te sean dadas ojos míos
yo les beso las manos bésoles muy los pies
gracias narices mías muchas gracias oídos con que
escucho los ruidos de la Ofelia
antes apenas era una ciudad de Italia
sus tiros me llenaban de otra desgracia el corazón.
¡Dale sentido a tus sentidos!
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