7 cosas que haces en la cama y las mujeres ¡detestan!

A pesar de tanta información, muchos hombres siguen cayendo en los mismos errores cuando se trata de sexo, y tú ¿cuál de estos has cometido?

Redacción Kinky

5 mayo, 2017 5 mins de lectura

Dicen que no hay peor error que creerte mejor de lo que eres, y mucho peor cuando se trata de asuntos de cama; la verdad, aceptémoslo, en el momento de presumir sus habilidades sexuales, muchos hombres se echan demasiadas flores y a la mera hora siguen cometiendo errores básicos, ya sea porque no tengan mucha experiencia o porque ninguna de sus parejas se ha atrevido nunca a decirles “¡eso no se siente rico!”

En Let’s Kinky hicimos una encuesta con nuestro equipo femenino acerca de esas cosas que sus parejas hacen (o han hecho) y que simplemente no soportan, ya ni pensar que las disfruten. Te presentamos aquí las siete cosas que más nos repitieron, en orden de importancia ascendente, o sea, de la que menos votos tuvo a la que más; así que lee hasta el último punto, pues ése es el más importante (y todas nuestras encuestadas coincidieron).

7. Empujar su cabeza mientras te hace sexo oral
Para ustedes puede ser muy excitante debido a la sensación de control y sumisión que esta acción representa, pero para muchas chicas esto las hace sentir un poco muñecas inflables, además les incomoda, ya que tu pene en el fondo de su garganta puede provocarles arcadas o falta de aire. Ojo, no a todas les molesta, pero como no eres adivino, pregúntale a tu chica antes de hacerlo.
6. Tratar su clítoris como si fuera un “rasca y gana”
¡No, no y no! Muchos hombres creen que estimular el clítoris es igual a tallarlo como si estuvieran lavando la ropa o como si estuvieran jugando a un raspadito de la lotería. ¡Grave error! No solamente no conseguirás excitarla, sino que a muchas chicas esto les baja la calentura de inmediato, incluso les lastima; así que aplícate y aprende a estimular su clítoris correctamente, no son enchiladas, requiere de técnica, tiempo y delicadeza.
5. Masturbarla como si tus dedos fueran pistones de auto

El clásico “meter, sacar, meter, sacar” no suele ser tan efectivo como piensas, y mucho menos si lo haces con demasiada fuerza, créenos, esa zona es delicada y puedes lastimarla fácilmente. En vez de limitarte a meter y sacar tus dedos, intenta explorarla con tus manos, busca su zona G, mueve tus dedos en círculos, no te olvides de su clítoris… en fin, ocúpate de todas sus zonas erógenas y no únicamente de la vagina.
4. Juguetear con cualquier práctica más “fuerte” sin previo aviso
Lo que es fuerte para unas no lo es necesariamente para otras, pero hay una cosa en la que casi todas coinciden: si quieres intentar el sexo anal, DEBES platicarlo con ella antes para que sea de mutuo acuerdo. Lo mismo aplica para cualquier práctica que salga de lo ordinario: spanking, dirty talking, bondage, etc. No querrás entrarle a una práctica que a ella le resulte incómoda o cero sexy.
3. Preguntar incesantemente si le gustó y si se vino
Estamos entrando en la recta final, en las tres que más votos recibieron. El 90% de nuestras encuestadas coinciden en que les resulta sumamente molesto que, una vez concluido el acto, el hombre se traume preguntando “¿de verdad te gustó? ¿sí llegaste? ¿pero en serio te gustó?” ¡Vamos! Que si no se pueden dar cuenta solitos si a la chica le gustó o no, entonces sí están en problemas, ¿no creen?
2. Venirte en su boca o en su cara sin haberlo consentido antes
No chicos, la vida no es una película porno y no a todas las mujeres les gusta quedar embarradas de semen a tus pies, mucho menos si les cae de sorpresa. Créenos, si haces esto sin previo consentimiento te puedes enfrentar a un gran pleito, pues para muchas chicas no sólo es desagradable sin que lo consideran una falta de respeto. Nuevamente, habrá a quien sí le guste, pero tienes que enterarte antes.
1. NO DEDICARLE SUFICIENTE TIEMPO AL FOREPLAY
Y el ganador es… ¡el foreplay! Efectivamente, el 100% de nuestras encuestadas coinciden en esta queja: que el hombre no le dedique tiempo suficiente al juego previo y quiera pasar directamente a la penetración, como si a ellas les bastaran 2 minutos para humedecerse y estar súper excitadas (a veces ocurre, pero no es la norma). Hay muchísimos motivos por los que el foreplay es fun-da-men-tal y no lo puedes obviar. ¿Lo quieres resumidito? El juego previo puede ser la diferencia entre múltiples orgasmos y una carita de frustración.