Todavía no pasa la temporada de frío, por lo que es el momento ideal para disfrutar de una deliciosa escapada a un hotel con aguas termales. Y si además de entrar en calor, quieres también relajarte y obtener beneficios físicos como mejor circulación y una piel rejuvenecida, entonces estos hoteles son tu opción ideal: chécalos, enamórate y elige el que más se adapte a tus gustos y deseos.
En Valladolid, Yucatán encontrarás esta maravilla de la naturaleza que el hombre ha adaptado justo lo necesario para que lo aproveches y disfrutes al máximo. Se trata de un hotel boutique completamente eco-friendly. Su alberca de aguas termales se encuentra a 6 metros de profundidad y te recibirá dentro de una cueva original a 34 grados. No olvides pedir un delicioso coctel para relajarte aún más.
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Agua Blanca, en el bello estado de Michoacán, fue hasta hace 10 años un balneario de aguas termales, hasta que decidieron convertirlo en un fantástico resort de lujo. Ubicado en un lugar místico rodeado de manantiales, grutas y estalactitas, Agua Blanca te ofrece, además de sus aguas y su vegetación inigualable, actividades complementarias como avistamiento de aves, tirolesa y senderismo.
Uno de los lugares más visitados y amados de Guanajuato es San Miguel de Allende, epicentro de galerías de arte, eventos de moda y gastronomía internacional. Pero además de todo eso, cuenta con oasis como la Hacienda Taboada, un espacio colonial ideal para relajarse en familia o en pareja; sus pozos de aguas termales a 38 grados te harán sentir mejor tanto física como espiritualmente desde el momento en que entres.
Sabemos que normalmente no pensarías en Monterrey como un lugar para olvidarte de todo y relajarte profundamente, pero te equivocas, pues las Termas de San Joaquín son uno de los lugares más maravillosos que podrás conocer. Con una decoración que recuerda un poco a la arquitectura morisca, aquí podrás sumergirte en una de sus muchas albercas y vivir una experiencia de bienestar inigualable.
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Otra joyita más en San Miguel de Allende. En pleno corazón del Santuario de Atotonilco se encuentra Escondido Place, un lugar, como lo dice su nombre, escondido entre las maravillas boscosas de ese estado. En el hotel te consentirán con el mejor servicio y la mejor comida; en el spa, podrás disfrutar de tratamientos y masajes para reencontrar tu equilibrio; y, por supuesto, sus aguas termales serán un deleite para todos tus sentidos.
¡Busca, encuentra, disfruta!
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