3 poemas eróticos y románticos de Amado Nervo

27 agosto, 2019 4 mins de lectura
Compartir

Juan Crisóstomo Ruiz de Nervo y Ordaz, mejor conocido como Amado Nervo, fue un poeta nacido el 27 de agosto de 1870 en Tepic, México. Entre sus grandes amigos, destacan escritores como Luis G. Urbina y Rubén Darío, otro poeta que tiene versos muy Kinky. En su país natal ejerció diversas profesiones, desde periodista y docente, hasta embajador. Sin embargo, falleció por uremia a la temprana edad de 48 años en Montevideo, Uruguay.

Su cuerpo fue transportado a México seis meses después de su muerte y recibió un merecido homenaje. Amado Nervo fue sepultado en la Rotonda de los Hombres Ilustres el 14 de noviembre de 1919, un honor que pocas personas han recibido y quienes lo han hecho, es porque han realizado grandes contribuciones a la historia y la cultura de la República Mexicana. Si quieres conocer un poco más de este poeta y dejar que toda su pasión invada tu cuerpo, ¡tienes que leer estos sensuales versos! 

NO SÉ QUIÉN ES

¿Quién es? -No sé: a veces cruza 

por mi senda, como el hada 

del ensueño: siempre sola… 

siempre muda… siempre pálida… 

¿Su nombre? No lo conozco. 

¿De dónde viene? ¿Do marcha? 

¡Lo ignoro! Nos encontramos, 

me mira un momento y pasa: 

¡Siempre sola…! ¡Siempre triste…! 

¡Siempre muda…! ¡Siempre pálida! 

Mujer: ha mucho que llevo 

tu imagen dentro del alma. 

Si las sombras que te cercan, 

si los misterios que guardas 

deben ser impenetrables 

para todos, ¡calla, calla! 

¡Yo sólo demando amores: 

yo no te pregunto nada! 

¿Buscas reposo y olvido? 

Yo también. El mundo cansa. 

Partiremos lejos, lejos 

de la gente, a tierra extraña; 

y cual las aves que anidan 

en las torres solitarias, 

confiaremos a la sombra 

nuestro amor y nuestras ansias…

Te recomendamos leer: 2 poemas eróticos de Homero Aridjis

A LEONOR

Tu cabellera es negra como el ala

del misterio; tan negra como un lóbrego

jamás, como un adiós, como un «¡quién sabe!»

Pero hay algo más negro aún: ¡tus ojos!

Tus ojos son dos magos pensativos,

dos esfinges que duermen en la sombra,

dos enigmas muy bellos… Pero hay algo,

pero hay algo más bello aún: tu boca.

Tu boca, ¡oh sí!; tu boca, hecha divinamente

para el amor, para la cálida

comunión del amor, tu boca joven;

pero hay algo mejor aún: ¡tu alma!

Tu alma recogida, silenciosa,

de piedades tan hondas como el piélago,

de ternuras tan hondas…

Pero hay algo,

pero hay algo más hondo aún: ¡tu ensueño!

LA FELICIDAD

Un cielo azul de estrellas

brillando en la inmensidad;

un pájaro enamorado

cantando en el forestal;

por ambiente los aromas

del jardín y el azahar;

junto a nosotros el agua

brotando del manantial

nuestros corazones cerca,

nuestros labios mucho más,

tú levantándote al cielo 

y yo siguiéndote allá,

ese es el amor mi vida,

¡Esa es la felicidad!…

Cruza con las mismas alas

los mundos de lo ideal;

apurar todos los goces,

y todo el bien apurar;

de lo sueños y la dicha

volver a la realidad,

despertando entre las flores

de un césped primaveral;

los dos mirándonos mucho,

los dos besándonos más,

ese es el amor, mi vida,

¡Esa es la felicidad…!

{"video":"https://www.youtube.com/watch?v=q1lTVER7rMY","width":"350","height":"250"}

Conmemora el natalicio de Amado Nervo con estos que son algunos de sus poemas más sensuales. En cada palabra se puede distinguir que era un hombre enamorado de la vida y del amor, lleno de sentimientos y de pasión. Dedicar poemas puede ser muy Kinky, así que no esperes más y usa estos versos para conquistar a quien tú quieras, ¡esa persona caerá rendida a tus pies! 

Toca, siente, provoca. 

Y si esto te interesa, no te puedes perder: La Perla, un relato erótico de Ethel Krauze