Terriblemente tuya
acudo noche a noche a la inquietud de tu cama,
bric-a-brac, bric-a-brac, bric-a-brac,
los grillos nos espían
un torrente de mariposas
cubre la desnudez de nuestros cuerpos
y celosamente conservan las ondulaciones de tu talle.
Yo guardo en mi memoria.
tus labios explorando mi cuerpo.
Entro lentamente por tus venas
hasta inundar
todos los rincones de tu cuerpo
rescato tu nombre milenario
en cada arteria
te pierdo y me encuentro
en la profundidad de tu mirada
sin compañía alguna
invado tus pulmones
y vivo
y me recreo
con el aire que respiras
avanzo por debajo de tu piel
y organizo con exactitud
el metabolismo de tus penas
y tu cuerpo se convierte
en la zona sagrada de mi vida.
sin embargo,
hoy es mañana
y mañana será nunca.
¡Toca, siente, provoca!
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