El cabello es uno de los elementos en los que un hombre se fija mucho cuando conoce a una chica y, en general, es un gran atractivo físico. Por eso, es muy importante que siempre lo mantengas sano y una de las formas en las que puedes lograrlo es con alguna mascarilla casera, porque muchas veces tienes en tu hogar todo lo que necesitas para tener un cabello envidiable.
Uno de los problemas que se presenta con mayor frecuencia es el frizz. ¿Cuántas veces has tenido el cabello con una carga importante de electricidad estática o tan esponjado que te dan ganas de ya no salir de casa a esa fiesta especial? Para combatirlo, puedes mezclar una cucharada de aceite de almendras, medio aguacate y una yema de huevo hasta formar una pasta.
Aplica la mezcla en todo tu cabello desenredado y seco, deja reposar 30 minutos y enjuaga con agua tibia. Repite esta mascarilla cada dos semanas y verás cómo tu melena luce mejor. Si quieres tener mejores resultados, utiliza una gorra de plástico mientras la mascarilla hace su trabajo, con esto aseguras que los ingredientes trabajen mejor sobre tu cabello.
Veamos, quieres tener el cabello lo suficientemente largo como para lucir peinados muy sexys, pero desde la última vez que lo cortaste no ha crecido como tú quisieras. Bueno, tal vez esta situación se de porque tus folículos están tapados y debes mantenerlos limpios para que veas cambios en el largo de tu cabello.
Para esto, solamente debes preparar tu mascarilla con cuatro cucharadas de yogurt natural, una cucharadita de bicarbonato de sodio y el jugo de dos limones. El resultado de la mezcla debes aplicarlo sobre el cuero cabelludo. Deja actuar 20 minutos y después enjuaga con agua tibia; los ingredientes de esta mascarilla funcionan como limpiadores de grasa y, en general, tendrás mejores resultados si la aplicas antes de dormir.
Sí, lo sabemos. Si hay algo que odias es cortar tu cabello y que luzca increíble desde la raíz para que, al llegar a las puntas, encuentres un problema de orzuela. Para esos casos, no necesitas más que miel, vinagre y aceite de almendras, pues estos elementos contribuyen a que tu cabello se vea sano, suave y brillante.
Lo único que necesitas hacer es mezclar 2 cucharadas de miel, 1 cucharada de vinagre blanco y 1 cucharada de aceite de almendras. La mezcla va directa en el área de las puntas, nada más, pues es la zona afectada. Deja actuar por media hora y enjuaga con agua tibia. Es claro que no vas a tener resultados inmediatos, pero si la utilizas 3 veces por semana, lo más seguro es que en poco tiempo se mejore la apariencia de tus puntas.
Ahora ya lo sabes, con esas 3 mascarillas puedes tener tu cabello muy cuidado. Además, a partir del momento en el que las aplicas debes tener mejores hábitos con él, por ejemplo, en vez de utilizar tintes con amoniaco para darle nueva vida, pronto podrás utilizar algunos hechos a base de grafeno y, si así lo deseas también puedes optar por usar algún producto para rescatarlo en cualquier situación.
¡Hazte Kinky!
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