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Tenemos claro que los dormitorios son para dormir; sin embargo, tú lo sabes y nosotros lo sabemos: también son para llevar a cabo encuentros de erotismo y sensualidad; son un espacio de retiro diario tanto para soñadores como para amantes Kinky. Y para inspirar romance –no solo relax–, puede ser útil repensar un poco el ambiente que tu habitación proyecta y analizar si además de ser ese santuario personal en donde puedes ser tú misma/o, también se presta como generador de la atmósfera ideal para disfrutar de las artes de la sensualidad. Piensa en un espacio acogedor, cálido y sensual. Si la decoración de tu recámara carece de esa chispa para encender el fuego de la pasión, vale la pena crear un ambiente capaz de evocar a los dioses del amor y la pasión durante todo el año. Te estamos hablando de algo más que velas y aromas afrodisíacos, no importa si tu recámara es un espacio pequeño, puedes lograrlo con algunos tips que te vamos a dar. Con estos consejos y técnicas de diseño de interiores, puedes convertir tu habitación en un refugio de ensueño sensual. ¡Atrévete y hazte Kinky!
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1. Adáptate a una paleta de colores limitada. Si todo en color blanco no es el ambiente ideal para ti, puedes atreverte a utilizar tus colores favoritos, pero de una manera sutil y elegante.
2. Monta la iluminación en la pared. Si no cuentas con el espacio suficiente para colocar mesitas de noche, considera montar tu iluminación por medio de lámparas en la pared.
3. Instala cortinas blackout. Las cortinas que bloquean casi por completo la luz del exterior son imprescindibles para que puedas permanecer en la cama todo el tiempo que desees. Para una relajación total que dé entrada a una sesión de caricias en donde el tiempo no pase, cada ventana debe tener cortinas gruesas que puedan aislarte del mundo exterior.
4. Crea un efecto visual de amplitud con espejos. La ilusión de un espacio con espejos es un truco clásico que siempre funciona. Además, vas a poder observar toda la acción desde un primer plano. Los espejos son perfectos para dormitorios más pequeños, puedes agregarlos como toque especial en una de las paredes para duplicar visiblemente el espacio.
5. Invierte en ropa de cama lujosa. Si el objetivo es pasar mucho tiempo en la cama –guiño, guiño–, tienes que equiparla con ropa de cama que invite a quedarse en ella la mayor parte del tiempo. Un set de sábanas de seda que combinen con los colores de la decoración de la recámara y algunos almohadones cómodos perfectos para ser utilizados en algunas posiciones pueden ser el complemento perfecto para la sensualidad del momento.
6. Elimina los distractores. El dormitorio debe ser un lugar relajante para una pareja. Te recomendamos eliminar tu espacio de trabajo de la recámara, ya que puede dar la sensación de prisa. Lo ideal es tener un espacio para cada cosa y si vas a adentrarte en una sesión de pasión, no debes estar pensando en trabajo o contestando mails.
Y el más importante:
Concéntrate en esa persona especial. La mejor manera de hacer que tu recámara sea sexy es crear un espacio tranquilo en el que tu pareja pueda sentirse cómoda y deseada.
Aunque a menudo puede parecer frustrante y desafiante, planificar una habitación pequeña con un ambiente sensual puede ser divertido e inspirador. Atrévete y…
¡Hazte Kinky!
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