¿Por qué las mujeres son infieles?

Ya hablamos en un artículo anterior sobre los motivos que pueden llevar a los hombres a la infidelidad; pues hoy es el turno de ellas porque sí, ellas también ponen el cuerno y, aunque coincidamos en algunas cosas, la mayoría de las veces las razones para hacerlo difieren entre hombres y mujeres. Spoiler alert: sí, eso de que en ellas es más importante lo emocional que lo sexual tiene algo de verdad, ya te explicaremos.

Como siempre lo hacemos, te aclaramos antes de continuar que nada de esto es una regla inmutable ni un manual de instrucciones, por lo que cada caso de infidelidad es particular y puede estar motivado por muchísimos factores además de los aquí mencionados. Por eso, aunque estos consejos te servirán mucho, la única forma de entender realmente qué pasa por la mente y el corazón del otro es hablándolo; así que no le temas al diálogo y aprende a comunicarte con tu pareja.

Ahora sí, a lo que vinimos, estas son las 6 causas que más se mencionan en páginas de internet sobre sexualidad y pareja, así como en revistas que hablan del tema, pon mucha atención:

  1.   Falta de intimidad: no se siente satisfecha emocionalmente

Lo ponemos en primer lugar pues es, por mucho, la causa más mencionada por las mujeres. No se trata de una cuestión sexual, sino de intimidad, de esos pequeños actos que les hacen saber que el vínculo especial se mantiene. ¿De qué actos hablamos? Cosas sencillas y que todos hacen al principio pero que se van olvidando: besos, abrazos, caricias, un mensajito, un detalle inesperado, etcétera.

Pero sobre todo, lo que más le demuestra que te importa (y algo en lo que muchos hombres fallan) es que te comuniques con ella. Y con eso no sólo nos referimos a que le preguntes cómo le fue y cómo está; se trata de que propicies momentos de intimidad (solos ustedes dos) en los que puedan hablar de sus problemas, dudas, deseos, insatisfacciones, fantasías, etc. Una escapada a una cabaña o una noche en un LoveHotel pueden ser excelentes formas de estrechar el vínculo.

  2.   Falta de sexo: llevan mucho tiempo sin contacto físico

Ok. Tampoco pensemos entonces que el aspecto sexual les importa un comino. ¡No! El hecho de que posiblemente le dé menos importancia que tú, no quiere decir que no lo desee; la diferencia es que quizá aguante más tiempo que tú sin empezar a pensar en una aventura. La mayoría de las mujeres que han puesto el cuerno hablan de cifras mayores a un año sin tener contacto físico con su pareja; también la mayoría refiere haberse cansado de intentar y recibir negativas o de quedar “insatisfecha” post coito.

  3.   Rencores pasados: dulce venganza

He aquí un tema muy interesante. Muchas mujeres tienden a poner el cuerno en venganza por una infidelidad previa de su pareja; algunas lo hacen conscientemente y otras no, pero lo cierto es que se ha identificado como un patrón en la infidelidad femenina. Este hecho suele desprenderse de un fuerte rencor derivado de no haber podido perdonar de verdad un engaño pasado.

  4.   Inseguridad personal: quiere sentirse deseada

Al igual que los hombres, ellas pueden llegar a un momento de la relación en que sienten que ya no son atractivas o que sólo le resultan atractivas a su pareja. Sea o no verdad, muchas veces necesitan que otra persona les recuerde que son sexys y que son capaces de “prender” a alguien que no sea el de siempre. Por lo general – siempre y cuando tenga una buena relación con su pareja -, en cuanto se ha reafirmado su sensualidad le pone punto final al affaire.

  5.   Si es madre, quiere sentirse mujer de nuevo

En específico para las mujeres que son madres, la infidelidad suele ser tema común por el siguiente motivo: sus parejas olvidan que ser madre no significa dejar de ser mujer; entonces, las sacralizan y, casi en automático, las despojan de su sexualidad. Esto es fatal, pues como bien nos lo explica la sexóloga Vero Maza en su libro, una mujer que acaba de parir está llena de hormonas y trae más ganas que nunca, ¡imagínense si su marido ni las toca!

  6.   Porque se ha enamorado de alguien más

Y claro, el motivo que todos esperan no tener que vivir en carne propia: que realmente se enamore de alguien más y ya no sea feliz contigo. Sí, suena horrible y doloroso pero sucede y tienes que tener claro que no siempre ocurre por algo que tú hayas hecho o dejado de hacer; a veces simplemente surge una relación agradable con alguien más y va evolucionando incluso sin darnos cuenta. Si este es el caso, no hay nada que hacer al respecto, más que aceptarlo y continuar el camino.

Igual que les dijimos a ellas, todo esto no tiene la intención de justificar el engaño o de que tú digas: “pobre, merece otra oportunidad porque sólo quería sentirse deseada de nuevo”. No, no se trata ni de justificar ni de compadecer al otro, pero tampoco de satanizar como si uno fuera incapaz de hacer algo parecido; se trata de comprender, ser empático y, al final, tomar la decisión que mejor nos haga sentir con nosotros mismos.

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