En el eterno debate de si el tamaño importa o no, siempre habrá opiniones encontradas; pero la verdad es que, aunque te repitamos mil veces que para ellas el pene no lo es todo, la mayoría de los hombres no le dirían que no a unos centímetros demás, ¿no crees? Por ese motivo es que han proliferado montones de técnicas, aparatos y hasta cirugías que prometen darte algunos centímetros extra de extensión.
Ya te hemos hablado de los mitos y realidades sobre el alargamiento de pene: que si la cirugía implica más riesgos que beneficios, que si las pastillas y cremas no sirven en absoluto… en fin, hemos hablado tanto sobre el tema que no podíamos dejar de mencionar esta técnica que se ha puesto de moda y que promete ayudarte a aumentar aproximadamente cinco centímetros de largo y algo de grosor.
Es una técnica de agrandamiento de pene también conocida como “ordeñamiento”. Con tan solo escuchar esta última palabra te puedes dar una idea de por dónde va la cosa. Se trata de una serie de ejercicios supuestamente de origen ancestral en los que jalas el pene hacia abajo como si estuvieras, tal cual, ordeñando una vaca. En internet puedes encontrar muchísimos videos que muestran la forma correcta de hacerlo.
Según diversos testimonios en línea, hay hombres que han logrado hasta ocho centímetros de alargamiento por medio de los ejercicios de jelqing. Según lo que se dice en estos foros, debes realizar esta práctica de 5 a 20 minutos al día, entre 2 y 5 días a la semana; también según estas páginas, se trata de algo completamente seguro si no se aplica demasiada fuerza y si no se hace por más tiempo del recomendado.
Aquí es donde entramos en la polémica. Supuestamente, estos ejercicios funcionan a través de lograr el aumento de la presión arterial y la circulación del pene. El problema es que, si realizas una búsqueda en Internet, el 80% de los sitios que aparecen tienen nombres como “alargarelpene.com” o “comoagrandarelpene.com”; es decir, difícilmente encontrarás un sitio confiable (de alguna universidad o institución de renombre) que avale esta práctica.
Como sabes, en los tiempos que vivimos, no podemos confiar en todo lo que vemos en Internet, pues prácticamente cualquier hijo de vecino puede crear su propia página y decirte que está comprobado que la luna es de queso. De ahí la importancia de buscar sitios e información confiables, sobre todo cuando se trata de tu cuerpo y tu salud. En este sentido, en Let’s Kinky no podemos decirte con certeza que esta técnica sea segura o que funcione.
De hecho, los testimonios confiables de médicos e instituciones de salud, aseguran que, de no ser a través de la cirugía (que promete solo agrandar un par de centímetros), no existe aún una manera de alargar el miembro masculino de forma segura y permanente; incluso los alargadores de pene han sufrido una baja en sus ventas pues no suelen cumplir con lo que su publicidad promete.
A final de cuentas, si te empeñas en probar estos ejercicios, lo mejor que te podemos recomendar es que, antes de hacerlo, visites a tu urólogo, aproveches para hacerte un chequeo general de tu salud sexual y le preguntes a él (que sí es un experto) si es seguro y cuál es la forma correcta de hacerlos. Recuerda que un hombre consciente e informado, siempre será un hombre Kinky.
¡Hazte Kinky!
Y para que empieces a restarle importancia a tu miembro, explora otras posibilidades de dar placer: Aprende a usar tus dedos para complacer a tu pareja