Desde su aparición en 1981 y su posterior identificación en el año de 1983, el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) ha causado mucho revuelo en las noticias a nivel mundial y así se ha mantenido hasta nuestros días. Al principio, llamaba la atención por ser un virus no reconocido ni clasificado, lo cual hacía que fuera completamente letal para quienes lo padecían. Otro aspecto importante a considerar es que en aquel entonces, el VIH se relacionaba estrechamente con los miembros de la comunidad LGBT+.
Afortunadamente, en la actualidad la enfermedad ya no es necesariamente mortal para quienes la padecen. A partir del momento en que este virus surgió, los científicos y la industria farmacéutica han luchado incansablemente para encontrar una cura al VIH. A pesar de que no la han encontrado, la medicina avanzada con la que contamos hoy en día, permite que la calidad de vida de los pacientes con VIH sea excelente. Gracias a la reducción de los estigmas sociales, también sabemos que el virus de la inmunodeficiencia humana no es exclusivo de alguna comunidad, cualquier persona está expuesta a este virus si no lleva una vida sexual responsable.
Hoy se dio a conocer la gran noticia de que un grupo de científicos provenientes del Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa de Barcelona y del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, realizaron un estudio a seis pacientes diferentes que, además de VIH, padecían enfermedades hematológicas (de la sangre) graves y, hasta el momento, el virus ya no aparece en sus pruebas de sangre.
Cada paciente recibió un trasplante de células madre de distintos donadores. Cinco pacientes recibieron células madre provenientes de la médula ósea y el sexto paciente recibió células madre del cordón umbilical. Después de un corto periodo de tiempo, los cinco pacientes que recibieron células de la médula ósea, presentan una carga indetectable del virus en su sangre y en sus tejidos. Uno de los pacientes incluso dejó de presentar anticuerpos contra el VIH por completo. El paciente que recibió el trasplante del cordón umbilical fue el único cuya carga viral seguía siendo detectable.
A pesar de que durante el estudio los pacientes continuaron con su tratamiento de medicamentos antirretrovirales, los científicos que llevaron a cabo el estudio piensan que si durante un periodo de 18 meses, uno de los pacientes pudo reemplazar todas sus células por las células del donador, hay una fuerte posibilidad de que el virus no resurja porque ya desapareció de la sangre.
Ahora, los involucrados comenzarán un ensayo clínico en el cual participarán médicos e investigadores y que consistirá en la suspensión de los medicamentos de los pacientes. Debido al riesgo que conlleva, se les aplicarán tratamientos alternativos para mantenerlos controlados y monitoreados. El objetivo principal será comprobar si el virus regresa o, en efecto, ha sido erradicado del organismo de los pacientes.
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Este estudio está basado en los resultados que se obtuvieron con Timothy Brown, conocido como “El Paciente Berlín”: Timothy es un hombre que padecía leucemia y VIH. En el año 2008, se sometió a un trasplante de células madre para tratar la leucemia. Gracias a una mutación en la sangre que presentaba su donador y que lo hacía inmune al virus de la inmunodeficiencia humana, Brown pudo reemplazar todas sus células con las de su donador y, literalmente, curarse de ambas enfermedades.
A partir de ese momento, El Paciente Berlín, dejó de tomar sus antirretrovirales y hoy, 11 años después, el virus sigue sin aparecer en su sangre, por lo cual se considera que es la única persona en el mundo que se ha curado del VIH. Debido a que los donadores de los seis pacientes del estudio de España no son inmunes al VIH, no se sabe si podrán quedar completamente curados del virus. Sin embargo, esta investigación abre las puertas a nuevas posibilidades y nos acerca cada vez más a una cura. Si seguimos por este camino en donde la tecnología y la medicina van de la mano, pronto podremos decir que el VIH es cosa del pasado.
Recuerda que el estilo de vida Kinky involucra cuidarte a ti mismo y a los demás, no te confíes y protégete. A pesar de los avances de la industria farmacéutica, el uso de preservativo sigue siendo el método anticonceptivo con mayor índice de efectividad para protegernos de las Infecciones de Transmisión Sexual.
Cuídate y, ¡Hazte Kinky!
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