Creemos que ya todo el mundo lo sabe, pero por si las dudas, definamos primero qué es una rusa. La rusa, o como se le conoce en inglés: el boobjob, es una práctica sexual que a la mayoría de los hombres les encanta y con la que fantasean mucho; se trata de estimular el miembro masculino, pero en vez de con las manos, con los senos, o sea, básicamente es masturbarlo con las bubis.
Esta práctica les encanta ya que, como lo hemos dicho en otras ocasiones, en cuestión de sexo los hombres son primordialmente visuales (por eso consumen más pornografía mainstream que las mujeres); así que con una rusa lo tienen todo: la maravillosa vista de una de sus partes femeninas favoritas, la estimulación directa de su pene y el hecho de ver a su mujer “a sus pies” proporcionándole placer.
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HOMBRES
Hombres: ya sabemos que esta práctica es básicamente para que ustedes se relajen, gocen y se vengan; sin embargo, esto no significa que no puedan hacer algunas cosillas para mejorar la experiencia, así que pongan atención a lo siguiente si quieren que a su mujer le den ganas de hacerlo y que se repita constantemente.
1. Atención a tu limpieza personal
Obviamente, esto aplica siempre y en TODAS las prácticas sexuales, pero mucho más en aquellas en que tu pene estará cerca de su rostro (como ésta o la felación). Recuerda que de la vista y el olor nace el amor, así que además de que tu miembro esté limpio, procura recortar un poco el vello púbico para que no le moleste o le roce a ella. Será una gran atención para tu pareja y se quedará con ganas de volverlo a hacer.
2. Procura la reciprocidad
Nuevamente, aunque la mayoría de los hombres ubican a la rusa como la oportunidad perfecta para no preocuparse por nada y solo disfrutar, recuerda que en todo encuentro sexual debe haber cierto nivel de reciprocidad; así que considera bajar a hacerle un cunnilingus cuando hayas terminado, o tocarla y acariciarla mientras te hace la rusa, esto la excitará y se sentirá en mayor complicidad contigo.
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MUJERES
1. No te preocupes por el tamaño de tus boobs
Muchas mujeres piensan que deben tener unos pechos copa 40 para poder hacer una rusa (tal como se ve en el porno), pero la realidad es que, a menos que estés casi plana (como las gimnastas), puedes arreglártela para hacerlo. Solo se trata de colocar el pene bien en el centro de tu esternón y juntar con tus manos tus pechos. No olvides ver a tu pareja a los ojos para que la excitación suba al máximo.
2. Usa lubricante
Para que el pene resbale mejor entre tus senos, pídele que vierta una buena cantidad de lubricante sobre ellos; esto le gustará porque tus senos se verán lustrosos y brillantes, además no correrá el riesgo de lastimarse. También puedes echar tu misma el lubricante sobre su miembro y luego colocarlo en posición. ¡Recuerda que mientras más lubricación, más diversión!
¡Hazte Kinky!
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