Hoy en día, sabemos que existen muchos modelos de relaciones. El modelo tradicional (el de “somos novios, nos casamos y tenemos hijos”) ya no es una exigencia social como lo era antes y, de hecho, a muchos ya no les funciona. Por eso hoy se habla más de modelos como las relaciones abiertas o el poliamor; sin embargo, de acuerdo a muchos expertos, estos modelos tan abiertos esconden en realidad un miedo al compromiso.
El día de hoy no nos pondremos a analizar la validez o no de estos modelos de relaciones porque, finalmente, si todos los involucrados están de acuerdo, siempre serán válidos; más bien hoy queremos ayudarte a que identifiques ciertas señales típicas de que podrías estar escondiendo tu miedo al compromiso detrás de determinados argumentos, actitudes, acciones u omisiones.
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1. Siempre quieres mantener relaciones casuales
Una de las principales señales es que siempre quieres que tus relaciones sean informales; incluso si realmente te gusta la persona, sales con pláticas de “advertencia” en las que dices que no buscas nada serio, que quieres algo casual, que no estás listo para una relación formal, etc. Si esto es algo que haces siempre, cada que conoces a alguien nuevo, puede ser que estés evitando tener que lidiar con el compromiso y el esfuerzo que una relación implica.
2. No eres abierto sobre tus sentimientos
¿Te resulta difícil o incómodo compartir tus sentimientos con la persona con quien estás saliendo? ¿Alguna vez te han dicho que eres distante o frío? Esta puede ser otra señal de que tienes miedo al compromiso. Por ejemplo, si sueles ocultarle tus emociones a tu pareja, si prácticamente no hablas sobre lo que estás pensando o sintiendo, esta puede ser una forma de mantener una distancia para que no te sientas vulnerable.
3. Siempre encuentras defectos en potenciales parejas
Si cada que conoces a alguien nuevo, encuentras un defecto o una razón para “no querer algo serio”, puede tratarse de otra señal crucial. Piensa si sueles usar frases como: “Sí me gusta, pero…” y aquí puedes insertar cualquier cantidad de detalles anodinos, que van desde cosas físicas (tiene la nariz muy grande, es muy chaparra, etc.) hasta detalles de comportamiento (es medio enojona, habla mucho, tiene una voz muy aguda, vive muy lejos, etc.).
4. Te autosaboteas eligiendo malas parejas
Una gran señal de alerta es que sigas eligiendo el mismo patrón de parejas de siempre. El autosabotaje se desarrolla a nivel subconsciente: sigues eligiendo lo que detestas (personas celosas o infieles o violentas) porque inconscientemente sabes que no serán una buena pareja y, entonces, cuando la relación acabe, te confirmarás aquello de lo que intentas convencerte: “claro, todas son iguales, así que no vale la pena comprometerse”.
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5. Tienes una herida de abandono
Las personas con herida de abandono son aquellas que sufrieron un abandono doloroso en su infancia y, por lo tanto, tienen pavor de que los abandonen. Este miedo puede ser la causa principal del miedo al compromiso; ya que cuando te comprometes, te vuelves vulnerable y te involucras profundamente, entonces, si te llegan a dejar, el dolor es mucho más fuerte. El miedo al abandono puede, literalmente, eliminar tu capacidad de involucrarte emocionalmente con alguien.
¿Te identificaste?
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