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Tener sexo en la primera cita es una idea llena de fantasías y emoción. Los diferentes tabúes que antes existían al respecto se han ido desdibujando y cada vez es menos juzgado que, si sentiste química, te vayas a la cama con alguien que acabas de conocer; es más, para algunos es una fantasía súper excitante. Sin embargo hay algunos consejos que queremos darte para evitar que pases decepciones o malos ratos.
1. Hazlo solo si se da naturalmente
El sexo en la primera cita no debe forzarse, sebe ser algo que se dé naturalmente porque ambos sintieron tal química que desean poseerse en ese momento. Ahora bien, esto puede ser complicado en términos de consentimiento, ya que aún no conoces a tu cita lo suficiente como para leer su lenguaje corporal; así que asegúrate siempre de que ambos quieren y evita los malos entendidos.
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2. Ve sin expectativas
Recuerda que en el 90% de los casos: “expectativa + realidad = decepción”. Así que trata de no generar ninguna expectativa, ni buena ni mala; no pienses que será el acostón del siglo digno de una película de Hollywood, pero tampoco pienses “claro, seguro será horrible porque la primera vez siempre es horrible”. Solo ve con la mente abierta a lo que suceda y dispuesto(a) a disfrutar de lo que sea que ocurra entre ambos.
3. La protección es esencial
Nunca estará de más decirlo: sin gorrito no hay fiesta. Así que si estás esperando o deseando tener sexo en esa primera cita, lleva condones; nunca confíes en que el otro llevará seguramente porque, si ninguno de los dos lleva, hay dos escenarios a la vista: o se les arruina el plan de tener sexo y se quedan con las ganas, o terminan teniendo sexo sin protección, lo cual no es nada recomendable y lo sabes.
4. Y también la lubricación
Afortunadamente, cada vez más gente aprecia las bondades y maravillas del lubricante y lo ve como un básico de su botiquín sexual. Recuerda que hay muchísimos factores que pueden afectar la lubricación natural: ansiedad, problemas hormonales, haber bebido en exceso, entre muchos otros; así que, sin importar preferencias sexuales o identidades de género, un buen lubricante siempre será bienvenido.
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5. Pequeña conversación post-sexo
Aunque solo se trate de sexo casual, lo más decente que puedes hacer es tener una pequeña conversación después del sexo para confirmar que ambos estén en la misma sintonía: aclaren si fue solo algo de una noche o quieren volverse a ver; esto evitará que pases malos momentos esperando una llamada que no llegará o cargando la expectativa de alguien más solo porque no platicaron 5 minutos después de darle vuelo a la hilacha.
¡Hazte Kinky!
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