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La contaminación, el tabaco, el alcohol y las pocas horas de sueño son factores que fomentan la aparición de esos molestos círculos oscuros debajo de los ojos. Estas “bolsas” de color más oscuro que tu tez natural son el resultado de una mala circulación sanguínea y linfática alrededor del área del ojo. Suelen aparecer a partir de los 25-30 años y, si no se hace algo al respecto, pueden volverse cada vez más profundas.
Debes saber que la epidermis alrededor del ojo es 4 veces más delgada que en el resto de la cara, lo que provoca el color azulado de los vasos sanguíneos y la tendencia a desarrollar bolsas que reflejan una acumulación de agua y grasa. Aunque no son graves para nada, sí son antiestéticas y dan la sensación de un rostro cansado y avejentado; por eso hoy te damos tips muy simples para evitarlas o acabar con ellas si ya las tienes.
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1. Buenos hábitos de vida
Las causas detrás de la aparición de las ojeras pueden ser muchas y entre las principales se cuentan: fatiga, falta de hidratación, pasar demasiado tiempo frente a la computadora y una alimentación alta en grasas. Así que procura dormir tus 8 horas diarias, tomar al menos dos litros de agua al día, comer de forma equilibrada y, si tienes que pasar el día frente a la computadora, recuerda ajustar el brillo de tu pantalla y tomar descansos para tus ojos.
2. Hidratación
Además de la hidratación interna (que es la más importante) derivada de tomar mucha agua, es vital que consientas a tus ojos incluso más que a cualquier otra parte de tu cara; para eso te recomendamos aplicar un tratamiento hidratante (específico para ojos) de tu marca favorita por la mañana y por la noche. ¿El truco? Mantén esta crema en el refrigerador, el frío le aportará un efecto descongestionante que potenciará los resultados del producto.
3. Promover la circulación
Como ya te comentamos, las ojeras son causadas por la congestión de los vasos sanguíneos alrededor de los ojos. La solución a esto es mejorar la circulación y para hacerlo te aconsejamos realizar todos los días un pequeño masaje con los dedos; hazlo ejerciendo un poco de presión, comenzando en la parte externa y yendo hacia el interior con movimientos circulares. Lo mejor es realizar este masaje cuando te apliques tu contorno de ojos para evitar arrugar la piel.
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4. Uso de discos o mascarillas
Ahora ya las venden prácticamente en cualquier lado; algunas parecen máscaras para dormir (de esas que aíslan de la luz) y los discos son simples parches redondos que se colocan sobre los ojos y tienen un efecto calmante y relajante. Deja que tus discos o mascarillas se enfríen y luego aplícalos sobre tus ojos cerrados; hazlo al menos tres veces a la semana y verás que tus contornos tendrán un aspecto más suave, hidratado y lozano.
5. Soluciones más radicales
Para personas a las que nada de lo anterior les ha funcionado (muchas veces esto ocurre por herencia) existen las opciones de inyecciones de colágeno directo en la zona o de plano la cirugía estética que, si es realizada por un buen cirujano plástico, es un procedimiento sencillo que puede reducir hasta en un 70% la apariencia de las ojeras y las bolsas debajo de los ojos.
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