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Sí, la tecnología ha cambiado al mundo por completo; y no solo en términos de avances científicos o tecnológicos per se, sino en absolutamente toooodos los aspectos de nuestras vidas, uno de los más importantes, por supuesto, son las relaciones de pareja. Pareciera que hoy en día amor, sexo y tecnología van prácticamente de la mano, y todo esto tanto para bien como para mal.
El tema de la infidelidad es uno de los que se ha visto más afectado con la tecnología. Antes, era bastante sencillo determinar qué constituía una infidelidad: contacto físico erótico (besos, fajes, sexo) y/o enamoramiento de alguien más. Actualmente, las fronteras se han diluído, así que lo primero que tenemos que hacer para saber si eres un infiel digital es definir propiamente qué es la infidelidad.
La infidelidad para hombres y mujeres
Ojo. Lo primero que debes tener presente es que este término es bastante diferente para los hombres y para las mujeres. Generalmente, para un hombre la infidelidad se da pura y llanamente cuando se concreta físicamente un acto erótico, es decir, para el hombre, la mujer es infiel si se acuesta con otro. Punto. Por eso, según la lógica masculina, no existe infidelidad en la mayoría de las acciones digitales (redes sociales, internet, etc.).
Sin embargo, para las mujeres es radicalmente distinto. Para una mujer, puede existir infidelidad aun cuando no haya contacto físico; es decir, la infidelidad para ellas tiene más que ver con la lealtad que con el sexo propiamente. Ahí está la clave para que entiendas por qué ella te puede considerar infiel por acciones digitales aunque tú digas “pero si ni la conozco, nunca nos hemos visto”.
Por eso, lo que sigue es lo que PARA ELLAS puede significar una infidelidad digital, aunque tú pienses que no lo es:
1. Visitar páginas de citas
No solo existe Tinder, hay miles de páginas en Internet, y tu mujer se sentirá traicionada tan solo si las visitas con cierta frecuencia. Porque, desde la lógica femenina, no tendrías ni siquiera que estar buscando si estás a gusto en tu relación con ella. Además, aunque tu intención inicial sea solo curiosear, la facilidad para dar el siguiente paso y contactar a alguien es un riesgo en el que puedes caer más fácilmente de lo que te imaginas.
2. Crear perfiles falsos
Si tu pareja llega a cacharte que tienes un perfil falso en cualquier red social (no importa que no sea una página de citas), seguramente lo asumirá como una traición y, por ende, como una infidelidad. Por qué ¿por qué habrías de tomarte la molestia de crear un perfil falso si no es para hacer algo que no es del todo correcto moralmente?
3. Coquetear por mensajes privados
Puedes pensar que es inofensivo coquetear sutilmente por DM o por Inbox, pero si de casualidad la persona con la que lo haces quiere algo contigo, entonces las cosas podrían degenerar muy fácilmente.
Como te podrás dar cuenta, cualquier acción que implique “esconderte”, borrar historiales de búsqueda, o preocuparte por que tu pareja no se entere, será percibida por ella como una deslealtad. ASí que ojo con lo que haces aunque para ti no tenga tanta importancia.
¡Hazte Kinky!
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