Si has escuchado la palabra motel, lo primero que se te viene a la cabeza son lugares de mala muerte ambientados con luces color neón y penetrante olor a tabaco eso sin mencionar la inseguridad latente tanto en el establecimiento como en los alrededores, pero atrás quedarán tus náuseas cuando disfrutes la experiencia de los LoveHotel y te pierdas en los menesteres del dios Eros.
Para comenzar hay que entender que un LoveHotel es un concepto nuevo y divertido para explorar el arte de la seducción y placer sexual en un ambiente seguro, discreto y de primera calidad sin dejar de lado la picardía que por naturaleza rodea este lado del amor.
Algunos LoveHotels tienen la opción de hacer reservación – servicio de gran utilidad en caso de celebrar tu aniversario o de asegurar un espacio en tu agenda para la escapada amorosa- sólo toma en cuenta que por ser lugares exclusivos las habitaciones están sujetas a disponibilidad. Un Tip Kinky es que reserves entre domingo y jueves, pues te será más fácil encontrar espacio y de paso rompes la rutina de recargar pasión sólo en fin de semana.
Por otro lado, si tu plan es pasar un rato agradable con una o más personas, hay algunos LoveHotels que tienen alberca en su interior e incluso ofrecen paquetes especiales decorativos para despedidas de soltera o eróticos, puedes ponerte en contacto con la administración del lugar elegido y platícales tu idea, aunque lo creas un sueño, la flexibilidad y versatilidad de estos templos sexuales son garantía de que te ofrecerán lo que necesitas.
Si lo que te detiene es la falta de vehículo y tampoco quieres perder el estilo usando lentes estilo Claudio Yarto, puedes llegar en Uber o Moto, hay varios LoveHotels que tienen las 2 versiones de suite ya sea en la “Torre del hotel” o en la sección de “Villas”.
Por último, pero igualmente importante es que a los LoveHotel sólo puedes entrar demostrando que eres mayor de edad, pues las atracciones como el Potro del Amor, Rincón del Sacrificio, La Cama Colgante, etc., son aptos para todos aquellos valientes que desean salir de la rutina y perderse en el placer sin dejar de lado la responsabilidad.