Ámsterdam, la capital erótica del mundo, al igual que el resto del planeta Tierra, se ha visto afectada por la pandemia de coronavirus. Por ejemplo, el popular Barrio Rojo tuvo que parar sus actividades durante el periodo de confinamiento, sin embargo, recientemente el primer ministro holandés Mark Rutte, anunció que las trabajadoras sexuales, los bares y el Barrio Rojo en general podían volver a la rutina desde los primeros días de julio; pero no todo es miel sobre hojuelas, ante una nueva normalidad la actividad sexual del Barrio Rojo deberá adaptarse a las nuevas normas sanitarias.
¡Aquí te contamos más acerca de ellas!
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Ahora que por fin han reabierto los escaparates y los burdeles vuelven a abrir sus puertas de par en par, las prostitutas y locales en general deben adaptarse a los protocoles de higiene establecidos por el gobierno, dentro de los cuales han quedado prohibidos los besos, el sexo oral y las posturas sexuales con contacto frente a frente, así mismo, resulta imperativo el uso de cubrebocas y guantes, aunado al uso obligatorio de condón.
Pese a dichos cambios en la zona roja de Ámsterdam y el negocio del sexo, se espera que poco a poco vuelva a ser uno de los espacios más populares y turísticos de la ciudad, ya que además de ser el lugar más erotico y Kinky de dicha ciudad, el Barrio Rojo destaca por hacer realidad las fantasías de sus visitantes y contribuir a la libertad sexual.
Aquí te dejamos un reportaje sobre cómo afectó la pandemia al Barrio Rojo, el cual se mantuvo cerrado desde el 15 de marzo. Cabe mencionar que aunque se pretendía dejarlo así hasta inicios de septiembre, la presión fue tanta que a partir del 1 de julio la prostitución volvió a ser legal en los Paises Bajos, pues a consecuencia de la pandemia, muchas de las trabajadoras sexuales se han visto en una grave crisis económica.
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Date la oportunidad de conocer el Barrio Rojo y déjate seducir por todo lo que este lugar tiene para ofrecer. Claro, con todas las medidas necesarias.
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