Como buen lector Kinky, ya te habrás dado cuenta de que las cerezas son un elemento fundamental de la imagen de este portal, pero, hasta ahora, no te hemos platicado por qué son parte de nuestra esencia Kinky; así que eso haremos hoy y, además, te diremos por qué es indispensable que las incluyas en tus rituales y fiestas de esta época y, por supuesto, cómo puedes hacerlo.
Sin duda alguna, la cereza es sinónimo de sensualidad. Su color rojo intenso nos remite a la pasión física, pero también a la fuerza vital que nos mueve: la sangre; su forma redondeada, el tamaño perfecto para jugar con ella en los labios, su cáscara tersa y brillante y, por supuesto, el famoso rabito que invita a probar muchas cosas sexys con tu lengua… Todo esto vuelve a la cereza una de las frutas más sensuales y provocadoras.
Y además de todo lo anterior, ¡su sabor es delicioso! Por eso, te queremos proponer que en estas fiestas de fin de año te pongas más Kinky que nunca y les des a las cerezas un papel protagónico. ¿Cómo? Para empezar puedes sustituir las clásicas uvas de Año Nuevo con esta fruta; eso sí, asegúrate de quitarles el rabito y deshuesarlas para que no haya ningún accidente. También puedes cocinar algún postre o adornar tus cocteles con ellas; verás que darán un toque chic y elegante.
Obviamente, guarda un lote de cerezas para después de la cena y utilízalas ya en privado para estimular los sentidos de tu pareja: cómelas de forma sensual, comparte algunas con tu amorcito y jueguen intentando anudar el rabito con la lengua. Recuerda que Ser Kinky se trata de aprovechar todo lo cotidiano y usarlo de una manera diferente para hacer de lo ordinario algo extraordinario, y estas fechas son ideales para ponerlo en práctica.
¡Hazte Kinky!
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