¿Por qué las drogas no son Kinky?

Desde hace 32 años, cada 26 de junio se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas; en el marco de esta fecha y tomando en cuenta nuestra responsabilidad social como Let’s Kinky, quisimos tomar esto como aliciente para decirte por qué, aunque su uso esté muy extendido y hasta normalizado, el uso de drogas no es Kinky en ningún sentido.

1. Las drogas disminuyen tu nivel de consciencia

Quizá la principal característica de cualquier tipo de droga es que altera tu estado de consciencia; en ese sentido, todo lo que experimentas mientras está sesgado por tu percepción. En Let’s Kinky siempre te hemos dicho que una de las cosas más increíbles del erotismo y el sexo es vivirlo con la consciencia de todos tus sentidos, por lo que si la percepción de tus sentidos está alterada es muy probable que no vivas la experiencia en plenitud y en profunda conexión contigo y con el otro.

2. Las drogas pueden llevar a conductas sexuales de riesgo

El punto anterior ha sido muy debatido (pues hay quienes afirman lo contrario desde su experiencia), pero este punto es una realidad comprobada. Cuando te encuentras bajo el efecto de alguna droga y tu consciencia disminuye, es muchísimo más probable que te olvides del condón y te expongas a muchos riesgos; de hecho un alto porcentaje de enfermedades de transmisión sexual son contraídas cuando la persona se encuentra drogada o alcoholizada.

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3. Las drogas pueden promover la violencia

Puede que alguien nos diga “depende de qué droga, algunas solo te calman”; pero no nos referimos tanto a que alguien se drogue y se ponga violento, nos referimos a la violencia que hay detrás de todo el sistema de tráfico y distribución ilegal de drogas; es decir, aunque sea una violencia que no vemos, es importante tener conciencia de que detrás de cada compra de productos ilegales de este tipo,hay varias muertes en el camino. 

Como te podrás dar cuenta, todo lo que implican los puntos anteriores (violencia, conductas sexuales de riesgo, inconsciencia, falta de empatía, etc.) es justamente el extremo opuesto de lo que buscamos en Let’s Kinky; sabemos que cada quien es libre de tomar sus decisiones, pero nosotros seguiremos luchando todos los días por que esas decisiones nos lleven siempre al amor, la ternura, la consciencia y al sexo seguro y consensuado, siempre.

¡Hazte Kinky!

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