Lo que te vamos a decir es tan sabido que ya hasta es lugar común, pero no hay comparación que lo explique mejor: “los hombres son como horno de microondas y las mujeres como una olla de lento cocimiento”. Sí, la mayoría de los hombres se calientan en un minuto y así de rápido pueden venirse y enfriarse; mientras que las mujeres necesitan mucho más tiempo, tanto para prenderse como para llegar al clímax.
Por esto, uno de los motivos más frecuentes de insatisfacción en las parejas heterosexuales es justamente que el hombre se venga demasiado rápido y que espere que eso sea suficiente para que su mujer también se venga. Claro, habrá casos en que la mujer esté muy prendida y llegue al orgasmo rapidísimo, pero no es lo más común; por eso si tú sufres de esto con tu pareja hoy te daremos tips para que lo hables con él.
También podría interesarte esto: ¿Mejores orgasmos? ¡Haz estos ejercicios!
Siéntate con él y dile que quieres platicar de algo muy importante para ti. Debes hacer que tu pareja se sienta a gusto. Asegúrale que lo que le vas a decir no significa que lo quieras menos y mucho menos significa que quieres terminar. Dile que solo se trata de algo que tú necesitas y que estás segura de que él puede brindártelo. Refuérzale constantemente lo mucho que lo amas y lo importante que es en tu vida.
No vayas directo a: “Es que te vienes muy rápido”. Más bien explícale que tú tienes tiempos, ritmos y necesidades diferentes (puedes usar el ejemplo del horno del microondas) y que te has dado cuenta de que normalmente tu cuerpo requiere más estimulación para llegar al clímax; por lo tanto, te gustaría que pudieran extender más tanto el foreplay como la relación sexual en sí.
No solo te concentres en el hecho de que te gustaría que sus relaciones duraran más; aprovecha el momento y hazle cumplidos respecto a lo que sí te gusta (piénsalo antes de platicar con él). Puedes decirle cosas tipo: “me encanta cómo me besas el cuello, no dejes de hacerlo porque me vuelve loca”; el punto es que le digas todo lo bueno que tiene para que no termine sintiéndose que es el peor amante de la historia.
Te recomendamos también: ¿Cómo le digo que quiero hacer ‘cosas nuevas’ en la cama?
Recuerda que siempre que quieres conversar con alguien sobre un problema (y esto no solo se restringe a relaciones de pareja), lo mejor que puedes hacer es llevar ya pensadas soluciones. En este caso sería bueno que le propongas cosas muy concretas, como: “si sientes que ya te vas a venir, dímelo y en ese momento bajamos el ritmo un poco para darnos más chance”, o proponle que practiquen el Peaking de vez en cuando.
Recuerda que es muy fácil decir “la comunicación es lo más importante en la pareja”, pero es muy difícil aplicarlo de verdad, sobre todo cuando se trata de temas incómodos o que pueden lastimar a la otra persona; por eso es esencial que lo hables más temprano que tarde (porque si no se puede hacer una bola de nieve) y que sigas estos consejos para que no hieras a tu pareja y construyan una confianza para pláticas posteriores.
¡Hazte Kinky!
Esto te podría ser muy útil: Cómo hablar con mi pareja de nuestra relación… cuando él no quiere hablar