Hace mucho tiempo, la noche de bodas era particularmente especial porque, en teoría, era la primera vez que los recién casados harían el amor. Quizá para algunos siga siendo así, pero la realidad es que cada vez menos gente mantiene el precepto social de “llegar virgen al matrimonio”; sin embargo, la primera noche de casados debería seguir siendo especial, pues marca, simbólicamente, el inicio de un compromiso de amor y lealtad.
Por eso, hoy queremos darte algunos tips Kinky para que, independientemente de si es o no su primera noche juntos, sea una noche llena de ternura, erotismo y pasión. No pierdas detalle de lo que sigue:
1. El foreplay inicia desde la boda
Muchas veces te hemos hablado aquí de la importancia del foreplay; pero lo que quizá no te hemos dejado bien claro es que el juego previo no siempre empieza inmediatamente antes de hacer el amor, ¡puede empezar desde el inicio del día! Así que, aunque estés ocupado(a) saludando a los invitados, date momentos para ponerte coqueto(a): róbale besos, intercambia miradas, acaricia sensualmente… esto hará que, cuando lleguen a la habitación, los motores ya se encuentren en completa disposición.
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2. Preparen una habitación especial
No importa dónde vayan a pasar su noche de bodas, lo importante es que, aunque sea una habitación conocida, ustedes sientan que es un espacio “nuevo” y especial; para esto, te recomendamos preparar previamente elementos que ayuden a estimular todos los sentidos, como fragancias, velas perfumadas o difusores; música que les guste, alimentos afrodisíacos y sensuales, así como algún detalle como flores o champagne.
3. No abusen del alcohol
Te lo advertimos porque sabemos que en la mayoría de las bodas el alcohol suele circular a discreción: no se excedan con el alcohol. De ser posible no beban más que una o dos copas. Recuerda que el alcohol y el sexo son buena combinación, pero con medida; por ejemplo, el vino tinto es excelente para soltarte y ponerte de buen humor, pero si te pasas entonces el efecto será inverso y ninguno de los dos tendrá el performance esperado.
4. Lleven algún accesorio Kinky
Nuevamente con la intención de hacer de esa noche algo extraordinario, no se conformen con irse a la habitación juntos y ya. Preparen previamente algún accesorio que le dé un giro a lo acostumbrado: pueden comprar algo de lencería sexy, pueden llevar un juguetito sexual e incluso, si ya se conocen sexualmente hablando, llevar algo que cumpla alguna fantasía del otro; el punto es ponerle un plus a la noche con algún objeto no cotidiano.
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5. Menos presión, más diversión
Si de por sí en el sexo siempre existe la expectativa, cuanto más en la noche de bodas: se espera tener relaciones sexuales fantásticas dignas de película; sin embargo, recuerda que las expectativas pueden traer consigo decepción. Así que no se sientan presionados por que sea LA mejor noche de su vida, mejor piensen en divertirse, pasarla bien y festejar el amor que se tienen. Finalmente, si ambos están exhaustos, siempre estará la mañana siguiente para ponerse Kinkys.
Esperamos que con estos pequeños consejos, disfruten de su noche de bodas y la conviertan en el inicio de una vida sexual placentera, variada y excitante; o en otras palabras, el inicio de una vida de pareja completamente Kinky.
¡Hazte Kinky!
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