La pasión y el arrebato comienzan con un beso, es ahí cuando se sabe si habrá química con tu pareja o no, hay besos de muchos tipos: tiernos, sugerentes, amistosos o de arrebato, todo depende de con quien compartas el gesto. Pon en práctica estas diez sugerencias y verás los resultados.
Este se da en las sienes, muy cerca del nacimiento del cabello, inténtalo cuando tu pareja esté dormida para que despierte con todo el ánimo de tener sexo.
Deberán tener las cabezas inclinadas para lados opuestos, eso les ayudará a obtener una penetración más placentera y profunda de la lengua.
Se trata de que uno de los dos muerda (ustedes eligen la intensidad) el labio superior del otro, mientras que la pareja responde besando el labio inferior. Este es apto si les gusta el sexo más rudo.
Se usa para sorprender al amante en turno y calentar motores, lo único que deben hacer es tocar con la lengua los labios del otro mientras se toman de las manos. Una combinación de sexy y romántico.
Explora todo el cuerpo de tu pareja dándole besos por todos los lugares que se te ocurran, así se elevará la excitación en ambos. Ideal para el previo al sexo.
El clásico de las películas, apasionado y chupando los labios de la pareja, como si se estuvieran deleitando con un exquisito postre. Perfecto para recibir al ser amado después de un largo día de trabajo.
Uno de los dos deberá sujetar con sus labios los de su pareja. El que besa se encargará de acariciar con su lengua los dientes, lengua y paladar del otro. Aplíquenlo durante el sexo, es delicioso.
Sostiene entre los dientes -sin morder- el labio inferior de tu pareja . A continuación sigue con otro tipo de beso, como el beso ladeado.
Uno de los dos se recuesta en las piernas del otro y comienza a besar la entrepierna, ¿así o más sugerente? Perfecto para antes y después del momento Kinky.
El propósito es acariciar y besar cada rincón del cuerpo de la pareja con dedicación para proporcionarle una alta dosis de placer. Si alguno de los dos no está de humor, este tipo de beso le ayudará a recobrar el deseo sexual.
Pon a prueba todas estas recomendaciones y recuerda que el beso perfecto es aquel que sucede en el momento más inesperado.
¡Hazte Kinky!
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