Los fetiches más extraños del mundo

En gustos se rompen géneros y esto aplica también en lo sexual. Indudablemente, puedes ser tan Kinky como tu imaginación te permita; sin embargo, existen ciertos fetiches que rayan en la locura más profunda de las personas. Probablemente a ti jamás se te haya ocurrido que presenciar un accidente drástico o incluso representarlo podría ser un elemento que prende sexualmente a algunos individuos, empero, es una parafilia que existe y tiene un nombre: sinforofilia. Como este ejemplo existen miles de inclinaciones y fantasías sexuales –muchas de ellas son consideradas trastornos psicológicos– y, si creíste que el bondage y el fisting eran prácticas muy hardcore, déjanos decirte que eso solo es la punta del gran iceberg que la sexualidad representa en la mente de cada persona.

Cabe señalar que no todas las fantasías o fetiches son seguros, legales o adecuados para ser llevados a cabo. Tienes que tener muy claro cuáles son fetiches Kinky y qué tipo de inclinaciones salen del sentido común y la racionalidad del ser humano. Recuerda que NUNCA puedes hacerle nada a nadie sin su permiso. Si bien esta regla suena extremadamente obvia, existe por una razón: hay muchos fetiches terroríficos en el mundo, fetiches que se salen de estos límites y que no deben ser practicados. Dicho esto, vamos a enlistar algunas de las parafilias y fetiches más extraños que se le han ocurrido a personas random del planeta.

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Acrotomofilia

Se trata de una atracción sexual hacia las personas amputadas y, de hecho, es común entre los fetiches. Si bien esta parafilia podría sonar muy perturbadora, es algo que tiene un trasfondo psicológico muy amplio que si no causa daño a nadie, no pasa de una filia extraña y muy poco aceptada socialmente. Sin embargo, si este fetiche lleva a querer cambiar físicamente a la pareja, entonces sí está considerado como algo grave. Otro fetiche preocupante que tiene cierta relación con la acrotomofilia es la apotemnofilia: el deseo de convertirse en un amputado. Si la fantasía de perder una parte de tu cuerpo te excita sexualmente, debes buscar ayuda psiquiátrica lo más rápido posible.

Sinforofilia

Este es un fetiche que puede poner en riesgo tanto la vida de quien lo presenta como de las personas a su alrededor. Las personas con sinforofilia se excitan al ver accidentes automovilísticos, incendios en casas, puentes colapsados, desastres naturales, etc. La única forma en la cual podría dejar de ser riesgoso es escenificando una situación de esta índole, siempre y cuando se haya consensuado y no implique un riesgo real para la vida de los participantes.

Pirofilia

A algunas personas les gusta el sexo caliente, pero demasiado caliente. Tal es el caso de los pirofílicos, personas que se excitan sexualmente al ver, sentir o iniciar fuego. La única diferencia con los piromaniacos es que el trastorno de estos últimos les lleva a una conducta repetitiva de provocar incendios, sin motivo aparente, por una atracción no sexual hacia el fuego. Para los pirofílicos esta atracción es completamente sexual y pueden poner en riesgo tanto su vida como la de sus parejas.  

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Climacofilia

Por más extraño que suene, este fetiche existe. La climacofilia es la excitación sexual de ver a alguien caerse por las escaleras. Obviamente, esto no es para nada Kinky en el buen sentido de la palabra. Tirarse o tirar a alguien por las escaleras se trata como un trastorno mental y está penado por la ley en la mayoría de los países.

Como te mencionamos con anterioridad es importante aprender a detectar si tus inclinaciones sexuales y las de las personas con las que compartes tu vida son sanas o caen en los trastornos mentales. Recuerda siempre que tener un fetiche es una cosa, actuar en consecuencia es otra muy distinta. Las fantasías y la imaginación pueden llevarte a lugares oscuros y éticamente comprometedores. Si sientes dudas sobre la delgada línea entre el deseo erótico y el desorden mental, te recomendamos buscar ayuda de un profesional.

¡Hazte Kinky!

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