Pearly Gates: la posición que puede llevarte a la luna

La posición de la que te vamos a platicar hoy no es precisamente la primera posición que se te ocurriría cuando tienes un encuentro sexual, pero definitivamente deberías probarla (o sus variaciones) si quieres aprender nuevas formas de hacer el amor y quieres mantener las cosas interesantes en la zona del placer sexual. La posición sexual de Pearly Gates no requiere de mucha flexibilidad o fuerza, pero aún así, muchas personas no la han intentado porque no la conocen. No olvides agregarla a tu lista de tareas pendientes cuando pruebes nuevas posiciones, toma nota de cómo hacerla para que puedas gozar de sus deliciosos beneficios.

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¿Cómo hacerla?

Ambos deben estar mirando hacia la misma dirección: el techo. Tu hombre estará acostado boca arriba en la cama con las rodillas dobladas y los pies plantados en la cama. Estarás tumbada encima de él, también boca arriba con la cabeza por encima de la suya y hacia un lado mientras te penetra. La idea es un estilo Cucharita pero mirando hacia arriba. Para mantener el equilibrio encima de tu hombre, debes extender las piernas y doblarlas para que puedas mantener los pies sobre la cama. También puedes extender los brazos para mantener el equilibrio. Luego, él puede envolver sus brazos alrededor de tu cintura para ayudar a mantener el equilibrio y que no te caigas.

Existen muchas variaciones de Pearly Gates que puedes realizar: puedes poner tus brazos detrás de ti sobre el pecho de tu pareja o la cama para que puedas levantarte hacia arriba. También puedes acercar las rodillas al pecho para obtener un ángulo de entrada ligeramente diferente. Mientras él puede extender una mano para masajear tu clítoris o tus pezones.

¡Juega, toca y provoca!

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