Ha llegado el mes de quitarle lo cursi al 14 de febrero y para ayudarte a ponerle toda la sazón Kinky a esta fecha, tenemos el placer de introducirte una posición sexual que probablemente no conozcas: La Cuna. Contrario a lo que su nombre podría hacer pensar, esta postura te dará ganas de todo menos de dormir. Checa bien cómo se hace y cómo puedes sacarle el mejor provecho a nuestra posición sexual del mes.
Solo necesitan de una superficie plana y dura (piso o cama firme) y una pared para que el hombre se recargue y no se canse. Él debe sentarse recargado en la pared y con las piernas extendidas; entonces, ella se coloca dándole la espalda y se sienta lentamente hasta introducir el miembro en su vagina al final de la bajada. Una vez ahí, ella levanta sus piernas y él las toma con sus manos para empezar a mecerse al unísono.
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Esta posición le da al hombre el mando y le permite demostrar su fuerza e iniciativa, ya que todos los movimientos, el ritmo y la fuerza los marcará él. Es importante que agarre a su mujer por debajo de sus muslos y la levante por completo sobre él para que así, al mover su cadera, se genere el movimiento como de cuna. La mujer puede colocar su brazo sobre el hombre de su pareja para agarrar el ritmo juntos.
Además de que el hombre se sentirá en control y esto suele gustarles mucho, hay otros motivos por los que amarán esta posición: para empezar tendrán una vista privilegiada de los senos de su mujer y los observarán moverse al ritmo de las embestidas; además, las nalgas de la mujer se deslizan todo el tiempo sobre su pelvis y esto se siente fantástico; por último, por el ángulo de penetración, sentirá más presión sobre su pene.
Algunos consejos para que sea aún más sexy son: aprovecha que sus rostros están muy cerca y susúrrale al oído un poco de dirty talking, la volverás loca. De tanto en tanto, suelta una de sus piernas y coloca esa mano sobre sus pechos: acarícialos, apriétalos, estrújalos, dependiendo de qué tan apasionada esté la cosa. Y si tienes fuerza suficiente, prueba a levantar ligeramente tu cadera del suelo a la hora de embestir, la sensación será increíble.
Esta posición les fascina a las mujeres básicamente por dos cosas: la estimulación interna y la intimidad que implica. Respecto al primer punto, debido al ángulo en que entra el pene, la estimulación de la zona G es perfecta y súper satisfactoria. Y sobre la intimidad, esta postura logra un equilibrio perfecto entre pasión y cercanía, ya que al estar los cuerpos siempre en contacto se sentirán más cercanos y unidos en ese momento.
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Ahora, aunque pareciera que la mujer es completamente pasiva en La Cuna, esto no es del todo cierto y puedes hacer un par de cosas para hacer más Kinky esta posición. Con tus propias manos, estimula tus senos, esto le encantará; o mejor aún, con una mano toca tus senos y con la otra estimula tu clítoris. Además de que a él le encantará verte tocarte, tu orgasmo será mucho más intenso si hay doble estimulación. ¡Atrévanse!
¡Hazte Kinky!
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