Tips para revivir la pasión después de tener hijos

Cualquier pareja con hijos sabe que, una vez que llega el nuevo miembro de la familia, aunque en un sentido todo sea emoción y felicidad, en otros aspectos también es agotador y frustrante; esto último pasa mucho en la relación de pareja. Muchas parejas se alejan físicamente (en un sentido de intimidad y erotismo) cuando son papás, pues las nuevas responsabilidades los absorben por completo; así que hoy te daremos algunos consejos de expertos para rescatar la pasión después de tener hijos. 

1. Olviden por un momento sus títulos de “mamá” y “papá”

Ojo, que no se malinterprete, esto no significa que se quieran olvidar del bebé o que se vuelvan irresponsables y no lo pelen; nos referimos a que, dentro de sus posibilidades, se den un tiempo solo para ustedes. Si pueden tener una niñera o alguien que cuide del bebé, quizá lo puedan hacer más seguido y por más tiempo, pero si no tienen esa posibilidad, puede bastar con que se regalen 10 o 15 minutos una vez que el bebé esté dormido, pero en ese tiempo NO son papás, son como novios de nuevo. 

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2. Comiencen juntos un hobbie nuevo

Nuevamente, esto dependerá del tiempo que tengan disponible, pero sin importar si es mucho o poco, está comprobado que realizar actividades novedosas en pareja es maravilloso para reconectar. El consejo es: en vez de pensar en lo que solían hacer antes del bebé y lamentarse porque ya no pueden, busquen un pasatiempo que puedan comenzar juntos en esta nueva circunstancia, puede ser cocinar juntos, ir al parque con la carreola a leer un libro entre los dos, etc.

3. Hagan un “círculo mágico” en su habitación

Muchos sexólogos sugieren que, para que no se pierda el aspecto sexual en la pareja, establezcan un espacio simbólico en su cuarto reservado exclusivamente para ustedes y para el despertar de los sentidos. Es importante que ese espacio sea sagrado, en el sentido en que no permitan que nada que no sea ustedes se introduzca en él; por ejemplo, si ese espacio es su cama, entonces se paran de ella antes de empezar a hablar de temas paternales o antes de amamantar al bebé.

4. Piensa en lo que te excita

Y ya que hablamos de ese espacio mágico que tienen que hacer un esfuerzo por conservar, una forma de fomentar la intimidad es recordar el contexto en el que tuvieron una gran conexión sexual juntos y lo que más gozaban en ese sentido. Háganse preguntas como: ¿qué es lo que más me excita de mi pareja? ¿Qué características tenía la relación cuando empezamos? ¿En dónde nos gustaba más hacerlo? ¿En la cama, en el baño, en un motel?

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El hacer este ejercicio los llevará a recordar y a pensar en su libido actual (o falta de ella); es importante que recuerden que sobre todo en una relación ya de largo plazo, el deseo sexual no siempre surge de forma natural, sino que a veces tiene que ser trabajado. El primero se llama deseo espontáneo; el segundo, deseo receptivo (o sea que se deriva de la estimulación erótica); ambos son normales, pero con un hijo tendrán que concentrarse más en trabajar el receptivo.

5. Sean pacientes y amorosos con el otro

Las noches sin dormir, un bebé que llora y todas las demás exigencias de la paternidad generan mucho estrés, y el estrés hace que a veces sea difícil ser una pareja amorosa y presente. Entonces, cuando tu pareja se olvida de hacer algo que le pediste o no es tan cariñosa o parece que no te pela tanto; intenta no reaccionar de forma impulsiva y piensa que, así como tú, probablemente esté privado de sueño y/o estresado. Así que procuren ser pacientes y empáticos con el otro, esto ayudará a relajar las tensiones y, en consecuencia, puede favorecer acercamientos íntimos.  

¡Hazte Kinky!

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