Esta nueva tendencia se hizo famosa a partir de que la socialité Kim Kardashian relevara su pequeño truquito y la verdad es que a cualquiera le gustaría intentarlo porque ¿quién no quiere tener una cara más afilada?
Hay dos formas de hacer contouring: la primera con polvos y la segunda con maquillaje líquido. En ambas formas necesitas lo mismo, solamente cambia la textura del producto que apliques en tu rostro.
Pero no creas que es tan fácil, hay maquillistas que usan 17 productos para lograr un contouring digno de Hollywood, pero si tú no vas a ser retratada por miles de fotógrafos en una red carpet, con un kit básico lograrás un excelente resultado.
Ya con los elementos necesarios, hay que poner manos a la obra, sin embargo, no todas las caras son iguales, por eso aquí te vamos a decir cómo utilizar el contouring dependiendo tu tipo de rostro.
La longitud de tus mejillas es mayor a la de tu línea de cabello y la parte baja de tu rostro termina en una punta hacia tu barbilla.
Concentra el color en las partes más anchas de tu rostro, es decir en la parte baja de tus mejillas. Termina con un poco en las esquinas superiores de tu frente para balancear con la parte de abajo. ¡Nunca apliques color debajo de la barbilla!
El largo de tu cara es mayor que el ancho y tu barbilla y frente no terminan en punta. Este rostro se caracteriza por una quijada recta y marcada.
Debemos crear algunas curvas en tu rostro, por lo que se necesita concentrar el color en las orillas,cuidando que las líneas no sean completamente rectas. Piensa en dibujar la forma de una hamaca de la parte más alta de tu oreja, hacia tu barbilla.
Tu rostro es aproximadamente 1/3 más largo que ancho y no existen esquinas demasiado marcadas, ni en barbilla y línea de pelo, ni en los pómulos.
Lo que debemos hacer para este caso es definir la línea natural de los huesos de los pómulos, sin hacer un efecto dramático, pues podría desbalancear tu rostro. Aplica color desde el centro de tu oreja en diagonal hacia la esquina de tu boca.
El ancho y largo de tu cara son similares, además no tienes esquinas pronunciadas. Esta forma es muy juvenil y femenina, por lo que debes concentrarte en difuminar muy bien para no recargarte de dramatismo. Aplica el color en las orillas exteriores creando una diagonal y lleva el tono sobre toda esta zona.
La línea de tu cabello es angosta y a partir de la parte más baja de tus orejas se forma una diagonal hacia tu barbilla, simulando un triángulo invertido.
¡Suertuda! Si posees este tipo de rostro lo más probable es que tengas unos pómulos prominentes, por lo que solo necesitas afinarlos un poquitito. Concentra el color debajo de tus mejillas, en líneas delgadas. Réstale severidad a tu barbilla aplicando maquillaje en esa zona.
El último tip para cualquier tipo de rostro es: Cuidado con las cantidades, hay que tener la mano ligera, no queremos que termines pareciendo un personaje de circo. Estamos seguros que con estos trucos de maquillaje, lograrás un rostro muy seductor y muy Kinky.
¿Ya maquillaste tu rostro como toda una mujer Kinky? Ahora vístete para que te desvistan